En esta canción, Pyro ha decidido retratar de manera cruda y honesta el proceso de sanar. Lejos de cliches motivacionales, o discursos vacíos de superación, esta canción lo-fi pop nos hace abrazar la montaña rusa que implica vivir con depresión. La letra es íntima, casi como si estuviéramos leyendo un diario en voz alta, con versos que van de la resignación, la esperanza y la contradicción interna.
Musicalmente, este track se apoya en una base poco convencional con bajos con armónicos inusuales y una percusión de palmas que le añaden textura pero no se roban el protagonismo entre sí. Es un sonido artesanal, que encaja perfecto con la dedicada voz.
Pyro no intenta glorificar el dolor ni disfrazarlo de luz, sino más bien, reconocerlo como parte del camino. Es altamente agradable escuchar una reflexión sin filtros lo que muchos prefieren callar.






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