Minimalista pero cargada de intención, tank parade es una cápsula sonora de lo-fi rock que desarma el centro del poder con guitarra suave y voz honesta. Dylan Rockwell escribe desde el corazón del caos: Washington D.C., justo cuando desfilan tanques por las calles como parte de un espectáculo político absurdo. En lugar de responder con gritos, lo hace con sutileza, ironía y una tristeza quieta.

Esta canción fluye con acordes tibios y un ritmo tranquilo que contrasta con la tensión que describe. “I believe there’s nothin’ so weak as scaring your neighbors” nos lanza con la calma de quien ya entendió todo, sin necesidad de alzar la voz. Es un tema que observa, registra, y cuestiona desde el margen, sin moralizar y dejando claro su punto.

El final, un mantra repetido de “I can see everything now”, el cual se siente como un despertar silencioso, como abrir los ojos después de una pesadilla y decidido que el siguiente momento sería distinto. Esta canción es una protesta sin estridencia para oídos atentos y corazones que no se dejan endurecer.

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