¡En este tema destaca la intensidad de cada uno de sus elementos!
Esta canción no se guarda su energía e intensidad, desde el inicio arranca con sonidos densos provenientes de la guitarra y la batería, al mismo tiempo que el bajo guía un sonido más denso que ha de seguir su intérprete. El tema adquiere notas que la hacen sentir como un punk de garage, no se preocupa por sonar pulido, pero sí energético y de transmitir esa sensación de caos en cada nota y en cada verso. Cerca del minuto 1:44 tenemos un rasgueo de guitarra que brinda un momento de tranquilidad a la canción, solo son unos segundos, pero es el tiempo necesario para tomar aire.
La voz de su intérprete tiene este tono grave que eleva la voz para cantar cada verso, queda ideal con la música porque también su interpretación sale de lo más profundo de su garganta, hasta llegar a esta explosión sonora digna de un mosh pit, cargado de emoción, energía y una vibra intensa.
End Sessions 
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