¡Un pop rock que se desarrolla con calma!
Una guitarra acústica y la voz de Kit Vipers son el recibimiento perfecto en este tema que va adquiriendo una melodía más pop después de algunos segundos. Este tema atrapa justo por eso, porque va creando un ambiente que se siente cercano a nosotros, en donde la melodía es parte importante, incluso deja marcadas esas pausas que le dan un toque especial y agilidad a la interpretación. La batería aquí va marcando ese ritmo de manera sutil y delicada.
La interpretación tiene un tono ligeramente grave, y es como si nos contara una historia a través de su canto. La canción puede conectar con aquellos que se han sentido incomprendidos dentro de su propio hogar. La letra describe a alguien que huye del dolor porque su casa dejó de sentirse seguro o acogedor. Aun así, esa persona carga con ese peso emocional imposible de romper, pues sigue soñando con su infancia y su hogar sigue teniendo un lugar en su corazón, aunque ya no pueda quedarse ahí.






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