Like Me (and Follow Me) es una dosis de ironía pop con toques de piano rock brillante. Jordan Siwek convierte el scroll infinito y los filtros fotográficos en poesía con ritmo, construyendo una canción tan pegajosa como sincera. Entre acordes juguetones y un groove que se parece al de Ben Folds o Billy Joel, pero con tintes digitales, Jordan nos lleva de paseo por el lado más humano, y vulnerable, del mundo hiperconectado.

La letra es una mezcla de sátira y confesión. Sí, todos queremos ser queridos, vistos, seguidos. Y él lo canta sin problema. Hay humor, pero también una melancolía sutil que se cuela entre líneas, especialmente cuando confiesa… “I just want a real connection, but all I see’s my own reflection.”

El arreglo está lleno de vida; el piano se suelta con energía, el bajo le da cuerpo, y la producción pulida resalta con frescura. Lo mejor: la canción se vuelve perfecta para cantar con tus personas favoritas en un espacio de fiesta, no solo desde una pantalla. En resumen, es un himno millennial con alma de clásico.

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