Algunas canciones no llegan para gritar, sino para hablarte al oído cuando más lo necesitas. Walk Your Own Way es exactamente eso, una balada con la melancolía bien puesta, como un vestido que guarda historia en cada pliegue. Con una instrumentación que respira de piano envolvente, cuerdas orgánicas, y guitarras sutiles, el tema se balancea con un ritmo de vals, como si caminara con pasos lentos pero firmes hacia una despedida inevitable.
La voz, íntima y contenida, no dramatiza… acepta. Y esa aceptación es lo que más duele. Las letras pintan imágenes que parecen sacadas de un recuerdo borroso, como lágrimas que “caen como plumas”, lunas que se esconden, y silencios que pesan más que las palabras.
Compuesta hace más de una década y rescatada en 2025, esta pieza suena como un acto de redención creativa. No es solo una canción, es un abrazo para quien necesita soltar. Fans de Damien Rice o AURORA encontrarán aquí un refugio hecho de nostalgia, valentía y belleza suspendida en el tiempo, de la cual disfrutarán.






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