¡Gemma Laurence nos cuenta una historia difícil en esta canción!
Una guitarra tranquila y suave es el inicio de esta canción, y es que la canción se toma su tiempo para integrar a los demás elementos, pues primero nos envuelve en la historia con la voz de su intérprete. Hay un ligero beat de batería en el fondo, solo está ahí para marcar el ritmo, no pretende ser protagonista o acompañamiento sonoro, pues ese trabajo es de la guitarra hasta el minuto 2:09, cuando la música sube un poco la intensidad, pero el sonido nostálgico y melancólico sigue con nosotros.
La interpretación de Gemma Laurence recuerda un poco a la de Olivia Rodrigo. Suave y emotiva, capaz de trasmitir esta sensación de tristeza, es casi como si nos contara la historia de su canción en un ligero susurro. Y es que la letra no es fácil de cantar, habla de esa necesidad de cuidar a otra persona que está sufriendo o pasando por una situación de violencia. Así, la letra mezcla ternura e impotencia, y nosotros podemos sentir cada emoción a través de su canto y su melodía.
End Sessions 
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