¡Un pop rock melódico que suena a pura nostalgia!
Cuando le des play a esta canción te vas a encontrar con un pop rock de ese que suena melódico y te atrapa por su sonido delicado, en donde la batería va con cierta sutileza marcando el ritmo, las guitarras suenan ligeramente más energéticas cuando deben subir el sonido, mientras que en otras se quedan acompañando la interpretación con un riff más tranquilo; en tanto, el bajo se queda del lado melódico en donde apoya al resto de los instrumentos para crear este ambiente nostálgico.
De este modo, la interpretación de Sebastián Coloma se apega a un tono melódico suave y tranquilo, dando este sentimiento de nostalgia en cada verso que, de por sí, ya está cargado de este sentimiento con la letra que nos habla de este amor intenso pero efímero que se termina cuando la realidad los regresa a ambos a su tiempo. La letra nos habla de lo que fue, el dolor por lo que terminó y la resignación de que el tiempo no se detiene.






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